El limón además de presentar cualidades excepcionales para nuestra salud, también es un potente limpiador natural. El zumo de limón, ya sea recién exprimido o concentrado en forma de aceite esencial, es capaz de matar la mayoría de las bacterias de la casa, especialmente de la cocina y baño, dejando a la vez un aroma a cítrico muy agradable en toda la casa.
La potente acción desinfectante del limón, es debida a su gran acidez. El nivel de acidez del limón es 7 veces superior al del vinagre. El limón actúa disminuyendo el PH de los microorganismos, de modo que éstos acaban muriendo ya que no pueden vivir en unos niveles de PH tan bajos.